Porque a veces el amor se esconde en medio de telarañas, momias, esqueletos, calabazas y Mansiones Embrujadas, quiero compartir con ustedes hoy el día de las brujas, muertos y ... bueno Halloween, lo que pasa cuando decidimos enloquecer un poco a veces, si sé que es un poco escalofriante que cite a Norman Bates, pero debo decir que es bastante apropiado para mi siguiente relato.
En medio de la niebla, encontramos una entrada medieval, en madera, con un picaporte en forma de murciélago y una aldaba bastante escalofriante. Sofía toca tres veces, como dice el letrero y nos abre un personaje siniestro, de piel pálida, colmillos afilados y vestido con una capa negra.
-Bienvenidas a mi morada... Entren libremente, por su propia voluntad y dejen parte de la felicidad que trae. -Con esta frase nos da la bienvenida Drácula a su Mansión embrujada. Sofia y yo nos miramos con un poco de aprensión, la verdad es que no somos las más valientes del mundo, siempre que vemos una película de terror, terminamos con pesadillas varias semanas, pero la curiosidad nos puede y decidimos dejar la felicidad que traemos en la morada de Drácula.
La casa está mal iluminada, de hecho las bombillas titilan mientras una niebla cubre el piso, de donde podemos ver arañas subir por las paredes cubiertas de telarañas, el sonido de ratones que parecen caminar cerca de nuestros pies, y algunos murciélagos cuelgan del techo. Caminamos con miedo, pero decididas por el pasillo, en donde de un ataúd aparece un zombie con la piel colgando, la sangre escurriendo de su boca y la ropa maltrecha.
-¡¡¡¡¡¡¡AAHHHH!!!-Gritamos Sofia y yo, inquietando unos hombres que están delante de nosotros, al ver nuestra cara de susto nos sonríen y siguen caminando, aunque ahora lo hacen un poco más lento, creo que con la intensión de hacernos compañía.
Seguimos el recorrido y llegamos a lo que parece ser un comedor, en donde una cena cubierta por telarañas , una calavera y dos esqueletos nos reciben, al parecer estamos a salvo, es decoración, no hay actores, no veo de donde podría salir algo que...
- ¡¡¡AHHHH!!! -desde debajo de la mesa se oye a una mujer gritar, la cual con movimientos torpes, sale de su escondite con su vestido ensangrentado y un cuchillo clavado en su estomago. Sin darme cuenta me he agarrado del brazo de uno de los jóvenes del grupo, cuando me doy cuenta lo suelto lentamente y me disculpo.
- Lo siento, me he asustado. -Le digo roja de la pena.
- Si me di cuenta, creo que lo mejor es que te escolte el resto del recorrido. -Me dice ofreciéndome su brazo.
- No te preocupes, vine con mi amiga Sofi. -Cuando volteo a mirar me doy cuenta que en medio de la confusión de la mujer en el comedor, nos hemos separado sin darnos cuenta, pues donde estaba Sofi, ahora hay una pared.
- Cuando salió el cadáver que estaba debajo de la mesa, tu amiga salto hacia atrás y activo una pared que divide los dos espacios. -Me explica el apuesto hombre disfrazado de esqueleto.
- Espero que este bien. -Digo en voz baja.
- Tranquila Ralph, tu amiga está con mi amigo Frankenstein. -Me dice haciendo alusión a mi disfraz de Ralph: el demoledor.
- Sofi y yo decidimos vestirnos de Ralph y Vanellope.
- Las vimos en la fila y nos han parecido muy originales sus disfraces, mis amigos y yo nos decantamos por los clásicos. -Justo cuando dice eso, unos señores algo molestos pasan por nuestro lado.
- Creo que es mejor que sigamos avanzando, no queremos que algún visitante nos haga la siguiente víctima. -Me dice señalándome a la actriz que está en el piso con el cuchillo en su estomago y ofreciéndome de nuevo su brazo, el cual tomo con agrado, la verdad es que no quiero continuar el recorrido sola.
Seguimos avanzando mientras intento mantener la calma y lucir como una mujer adulta que pueden afrontar el miedo sin gritar, aunque la verdad es que creo que lo estoy haciendo fatal, de hecho creo que he interrumpido el flujo sanguíneo del brazo del esqueleto.
Cruzamos otro pasillo y nos encontramos con una sala llena de muertos, uno tiene el cuello lacerado, otro parece haber sido asesinado y la verdad es que como estoy bastante asustada, no puedo seguir mirando por lo que escondo mi cara en el hombro del apuesto esqueleto. Mi reacción le hace reír y es en el momento en el que me va a decir algo, que uno de los actores se pone de pie y comienza a gritar, reacción que toma a todos los presentes por sorpresa y que hace que una de las mujeres que está a nuestra espalda encienda la luz de su celular iluminando la sala.
Su reacción causa la indignación de todos los presentes, quienes comienza a abuchearla, pues ha dejado al descubierto un poco de la magia que se escondía detrás de la maravillosa ambientación de la casa, acción que me hace recordar una película:
- ¿Conoces esa parte en las películas de miedo cuando alguien hace algo realmente estúpido y todos lo odian por ello? esta es. -Le digo a mi acompañante.
- Jeepers Creepers. -Dice el hombre esqueleto.
- En efecto, viste la película.
- Me impresiona que la hayas visto tú. -Me dice sorprendido.
- Bueno la verdad la oí más que lo que pude ver, es que no soy muy valiente.
- A mí me parece que si, al final que estás en esta casa acompañando a tu amiga.
- En efecto lo estoy, ella es amante de todo lo de terror.
- Y tú una muy buena amiga.
- Es mi mejor amiga. -Mientras hablamos puedo ver como la mujer comienza a iluminar la estancia y el corredor que acabamos de atravesar. Una acción que está prohibida, aunque a la mujer parece no importarle.
- Una pena... nos acaban de arruinar un poco la diversión. -Digo desanimada, aunque curiosa de saber qué se escondía detrás de los pasadizos que acabamos de cruzar. Trato de mirar con detenimiento la mansión iluminada, pero el apuesto esqueleto me lo impide diciéndome:
- Nunca mires atrás ,el pasado es un desierto de horrores.
- El hombre lobo. -Digo recordando la película.
- Veo que haz visto bastantes películas con tu amiga.
- Siempre celebramos juntas este día, por lo general viendo alguna película.
- Creo que tenemos muchas cosas en común.
- Eso no lo sabemos, la verdad es que me preocupa que te gusten las películas de terror. -Digo alzando una ceja.
- ¿Por? -Pregunta algo desanimado el apuesto esqueleto.
- Porque ...las películas de terror no crean asesinos, solo hacen que sean más creativos. -Mi comentario le hace reír, para luego decir.
- Scream.
- Creo que es de las peores películas de terror de la historia.
- Es un clásico. -Nuestra conversación se ve interrumpida por dos guardias de seguridad que llegan a escoltar a la mujer que ha infringido las reglas.
- ¿Quieres salir con ellos? -Me pregunta el apuesto esqueleto.
- ¿A dónde? -Le pregunto con curiosidad.
- ¿A comer un perrito momificado y una manzana envenenada?, invito yo. -Me dice sonriendo.
-¿Y el resto del recorrido de la Mansión?
- Creo que tú has tenido suficiente de sustos por hoy. -Me dice ofreciéndome de nuevo el brazo.
- ¿Y tú?
- Es la cuarta vez que la recorro, mi mejor amigo también es un amante del terror y por eso siempre venimos a hacerle compañía. -Reviso mi celular, donde puedo ver un mensaje de Sofi preguntando si me encuentro bien y confirmándome que ella está bien y muy bien acompañada, le digo que yo me encuentro en la misma situación y que un apuesto esqueleto me ha invitado a una cena de Halloween, ella me anima para que acepte la invitación, además de que me confirma que cuando terminen el recorrido se uniran a nosotros. Tomo el brazo del apuesto esqueleto y justo cuando nos encaminamos hacia la salida con los guardias nos dicen:
- Oh, perdón ha habido un malentendido, ustedes pueden continuar el recorrido.
- Eso hacemos, vamos hacia un destino mucho más interesante...
Nickole Naihaus L
Nickinaihaus
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